Tizayuca
● Cuatro sujetos roban un local, velador con un bate, como arma, logra detener a uno de ellos; los otros tres huyen
El velador entregó en la madrugada a un ladrón que logró capturar, a patrulleros; sin embargo, al otro día, cuando acudieron a levantar el acta de denuncia… se enteraron que la policía lo dejó libre
El vigilante de la plaza El Papalote, en la calle Ejército Mexicano, reportó que a la una de la mañana del pasado lunes, cuatro individuos robaron un local.
El policía no cuenta con arma para desempeñar su labor, por lo que con un bate tuvo que enfrentarlos, logrando inmovilizar a uno de ellos. Los otros tres optaron por darse a la fuga.
A los 10 minutos de lo ocurrido, vecinos que viven enfrente de la Plaza llamaron a una patrulla.
El vigilante contó lo sucedido, cuatro sujetos llegaron en un Jetta color gris. Dos de ellos se brincaron la reja y abrieron el local para comenzar a sacar las cosas y aventárselas a los otros dos que esperaban afuera. Cuando el vigilante los descubrió, uno de los que se encontraba adentro tuvo tiempo para brincar y fugarse con los dos que esperaban afuera.
Dentro del local dejaron al ladrón, al que el vigilante golpeó y logró dominar. Lo entregó a los policías de la patrulla 101, quienes lo esposaron y se lo llevaron en calidad de detenido.
El vigilante avisó a los comerciantes de los hechos. Les dijo que tendrían que levantar su denuncia y proceder ante el malhechor.
Los comerciantes se reunieron antes de comenzar a trabajar y fueron a las instalaciones de seguridad pública. Sin embargo, se llevaron la sorpresa de que no tenían a nadie detenido, ni tampoco tenían reporte de lo sucedido.
Entonces acudieron a la cárcel distrital para indagar si ahí lo tenían consignado… pero tampoco tenían a nadie.
Regresaron para investigar quiénes fueron los policías que dejaron escapar al individuo, pero sólo lograron reunir a los policías que, según ellos, habían trabajado en la madrugada, con la intención de que el vigilante lo reconociera, pero en su testimonio dijo que ninguno de los que le presentaron se había llevado al ladrón.
Las autoridades no ayudaron ni tampoco brindaron información sobre quién había manejado la patrulla en la madrugada.
Los comerciantes están indignados porque lo dejaran escapar. No tienen pruebas para proceder en contra de las autoridades que no hacen su trabajo para proteger a los ciudadanos.
