(En 7 días, nuevo Gobernador con OMAR FAYAD… 7 días como en la creación, como la semana, como las notas musicales, como los colores del arco iris, las siete maravillas del mundo. El 7 es un número que mucho tiene de mágico y que para Hidalgo en este momento tiene la magia de traer un nuevo jefe del Ejecutivo que entre sus pases maravillosos apuesta por caras nuevas que desarman a los dueños de cargos y puestos de la alta burocracia que por ser parte de los llamados “grupos de poder” los usufructuaban un sexenio sí y otro también, y que ahora de pronto, por falta de resultados se quedarán sin hueso, y sin posibilidad de reclamar, aunque esto no les resta el camino del reclamo o de otros modos de hacerse presente para mostrar fuerza. Ya ven al Grupo Universidad que hasta marchas anuncian  en un mensaje para OMAR más que para OLVERA, en una maniobra absurda de su líder GERARDO SOSA)
HORA DE FORTALECER AL PRI Y A

MELÉNDEZ, TAN GOLPEADOS POR LOS QUE SE VAN 
El Presidente del PRI ALBERTO MELÉNDEZ vivió un verdadero infierno desde que el mes de noviembre del 2015 fue elegido Presidente del Comité Directivo Estatal del PRI para el periodo 2015-2019 con el encargo de manejar el proceso electoral de la madre de todas las elecciones del 5 de junio en que se eligirían, como de hecho se hizo, Gobernador, alcaldes y diputados.
Se supone que en su calidad de máximo líder del partido era la autoridad fuerte del proceso y que nadie podría ni debía estar por encima de su autoridad para mantener sobre todo la unidad del instituto, que al final de cuentas es lo que le da al partido la posibilidad de triunfos, atendiendo lo que siempre se ha dicho en el sentido de que el PRI unidos es poco menos que invencible, pero desunido es fácil de vencer.
DOS “PRIS” EN LA PRÁCTICA…UNO MANEJADO DESDE PLAZA JUÁREZ
Y OTRO DESDE EL BULEVAR COLOSIO
Lo cierto es que ya en la práctica, hubo dos partidos, dos “pris” actuando. UNO con personal que si bien supuestamente trabajaba en el edificio del Bulevar Colosio, atendió todo el tiempo las indicaciones que les dieron desde Plaza Juárez, las señales de su ex jefe que lo siguió siendo todo el proceso, desatendiendo por lo mismo, en una actitud desleal, lo que decidía Alberto Meléndez.
Fue tal la intromisión, que sólo la prudencia de Meléndez evitó un problema mayor, pero los resultados finales hablan de una labor de traición que lastimó al partido en lo más importante que son los resultados y que ahora los que supuestamente están idos presumen como “en nuestros tiempos eso no hubiera pasado”, cuando todo mundo sabe que ellos lo provocaron con sus intromisiones, irresponsabilidades y alteraciones del ritmo normal del partido.
LASTIMAR A OMAR, LA META CENTRAL
Dicen que de lo que se trató siempre fue de lastimar las posibilidades de triunfar de OMAR y que para ello se valieron de todo, hasta de echarle arena a la maquinaria del partido para que no funcionara y por eso todo lo hecho para llevarse entre las patas a Meléndez, a quien no dejaron trabajar y lo estorbaron para que su tarea no diera frutos.
Muchos de los que actuaron como Judas, por cierto, siguen en el PRI.
 ES LA HORA DEL PRI, PRI
Pero se les acabó su hora a los desleales o SIMULADORES, como les llamó el paciente MELÉNDEZ en Actopan a los que estorbaron el proceso de OMAR y que ahora es cuando el gobernador OMAR debe fortalecer a su partido y a su presidente que merece la oportunidad de manejar a plenitud al partido y hacer una limpieza del partido, dejando fuera, suponemos, a quienes dañaron tanto al partido hasta provocar derrotas que con unidad se pudieron evitar.
ENRIQUE OCHOA REZA Presidente nacional del PRI dijo que para combatir la corrupción el PRI debe primero limpiar su casa, darle un combate frontal a la misma porque el sol no se tapa con un dedo y el gobernador OMAR ha dicho lo mismo.
Es la hora para empezar limpiando la casa propia, la del PRI donde por causas medias raras intentaron meterle zancadilla a su propio candidato, con acciones extrañas y muy raras, que a lo mejor hasta le consiguieron votos al cantante que luego quiso, en un acto de locura, anular la elección.
Con toda justicia y en una expresión valedera, Alberto Meléndez dijo en Actopan: “EL TRIUNFO EN EL ESTADO NO HUBIERA SIDO POSIBLE SIN TENER AL FRENTE A OMAR FAYAD”
Porque pese al PRI dividido y a la labor en contra de una parte de “SU” partido, OMAR se encargó, por su carisma y su don de gentes, de ganar la gubernatura. A una parte del PRI le debe mucho, al otro PRI le debe hacer cuentas y cobrárselas.