Ayer se dio a conocer que personal ministerial de la Subprocuraduría de Delitos de Género, Desaparición de Personas e Impacto Social, dependiente de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), obtuvo de un tribunal de enjuiciamiento, una sentencia condenatoria de 37 años de prisión para una persona del sexo masculino, a la que se le señala como el responsable de una desaparición cometida por particulares.

Los hechos que le fueron imputados a J. S. J. R., ocurrieron en febrero de 2022 en el estacionamiento del bar “Jalisco No Te Rajes”, ubicado en la Zona Plateada de Pachuca, de donde desaparecieron a la víctima, por quien se realizó la denuncia correspondiente y se dio inició a la carpeta de investigación por la desaparición de una persona.

Derivado de las investigaciones que llevó a cabo la representación social a través de la Subprocuraduría de Delitos de Género, Desaparición de Personas e Impacto Social, se determinó que al salir de dicho bar, la víctima se dirigía a su automóvil y fue interceptada por el imputado, mismo que lo golpeó y privó ilegalmente de su libertad.

Con base en las investigaciones, el cuerpo sin vida de la víctima fue localizado en la presa El Durazno, ubicada en San Agustín Tlaxiaca, lugar del que fue recuperado con apoyo de un equipo especializado en rescate.

A partir de los datos de prueba de los que se allegó esta Procuraduría, el Ministerio Público solicitó al juez de control, la orden de aprehensión contra J. S. J. R., mandamiento judicial que fue otorgado y posteriormente ejecutado por agentes de la División de Investigación.

Una vez aprehendido, la persona investigada fue puesta a disposición de un juez de control, autoridad ante la que personal ministerial formuló imputación y solicitó su vinculación a proceso por desaparición cometida por particulares, misma que fue concedida.

Una vez agotadas todas las etapas del proceso penal, el tribunal de enjuiciamiento dictó fallo condenatorio y en audiencia de individualización de sanciones al responsable le fue impuesta una sentencia de 37 años y seis meses de prisión, una multa económica y el pago por la reparación del daño.