PARA PONER FIN CON EL LEGADO DE LA DICTADURA
o Cientos de miles de personas marcharon a lo largo de la céntrica avenida Alameda de Santiago y en las principales ciudades del país
SANTIAGO, CHILE.- Si antes fue por una reforma educativa, los chilenos se movilizaron este domingo para acabar con el sistema de pensiones legado por la dictadura de Augusto Pinochet, en una de las mayores manifestaciones convocadas los últimos años y que acabó pacíficamente.
Cientos de miles de personas marcharon a lo largo de la céntrica avenida Alameda de Santiago y en las principales ciudades del país, superando al millón de personas que lo hizo en la primera marcha convocada hace tres semanas, de acuerdo con los organizadores.
Sólo en Santiago se reunieron 600 mil personas, según los convocantes, aunque la Policía lo cifró en 80 mil los manifestantes.
“La marcha de hoy es la más masiva, alegre y pacífica de los últimos dos años y medio. Sin duda que la voz de la ciudadanía se expresa mucho más clara y con más fuerza cuando se realiza como hoy”, dijo el intendente (gobernador) de Santiago, Claudio Orrego, al hacer un balance de la manifestación en horas de la tarde.
En un día primaveral y casi dos semanas después de que la presidenta Michelle Bachelet anunciara modificaciones al cuestionado sistema -que aún no se traducen en un proyecto de ley- miles de familias chilenas exigieron el fin de las llamadas Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).
“No queremos más AFPs, ni públicas ni privada”, dijo en el acto de cierre de la masiva manifestación, Luis Mesina, vocero del movimiento “No+AFP” que convocó a la marcha.
Instauradas por la dictadura de Augusto Pinochet en 1981, las AFPs administran los fondos de pensiones de unos 10 millones de trabajadores chilenos, entregando pensiones bajísimas a sus afiliados, muy lejos de su promesa de retribuir el 70% del último salario.