Obama declara a Clinton garante de su legado

Elecciones Estados Unidos 2016
●    “Hillary a veces no recibe el reconocimiento que merece”, dijo el presidente en el primer acto de campaña en el que participa para apoyar a la candidata

La de Obama y Clinton ha sido una relación difícil: su enfrentamiento en las primarias de 2008 resultó encarnizado pero luego la nombró secretaria de Estado, un papel que ahora le sirve de credencial. Ambos recordaron aquella dura pelea. “Pude ver lo inteligente y preparada que estaba, en los debates me sacudía, se sabía cada hecho, cada detalle. Ella es una mujer de Estado que nos hará sentir orgullosos en todo el mundo”, frente a una alternativa de “bravuconadas que no nos harán sentir más seguros”. En otro tiempo rivales feroces, Barack Obama y Hillary Clinton compartieron la noche del martes escenario en su primer mitin conjunto y escenificaron un cierre de filas del partido en torno a Clinton que contrasta con el desconcierto y las divisiones que aún provoca la candidatura de Donald Trump entre los republicanos. Obama irrumpió en la campaña con un encendido alegato a favor de la ex secretaria de Estado, a quien designó así garante de su legado.
“Creo en Hillary Clinton”, dijo en Charlotte (Carolina del Norte), un Obama entusiasta, que recordaba a la fiebre que desataba en los mítines de 2008. “Todo el mundo sabe tuitear”, dijo lanzando un dardo a Trump, pero gobernar es diferente “y Clinton ha sido probada, ha estado en las reuniones, ha participado en la toma de determinaciones y ha visto las consecuencias de lo que funciona y lo que no”.
Obama se declaró listo para “pasar el testigo” a quien considera “la persona más preparada que ha habido nunca” para la presidencia estadounidense.
El apoyo de Obama es un activo de oro para Clinton. El presidente goza de un ratio de aprobación del 56% a escala nacional, el más alto desde la ejecución de Osama bin Laden, y puede ayudarle a conectar con el voto joven que se le ha resistido a Clinton.
“Hillary no recibe a veces el crédito que se merece”, dijo Obama en este sentido, debido a la atracción por “lo nuevo” del electorado, algo de lo que, según admitió, él mismo se había beneficiado, pero que puede llegar a un absurdo: “Que haber hecho cosas, haber estado en la trinchera, no fuera una virtud”.

Related posts