ALFIL NEGRO
Las tradiciones, que son las costumbres que se transmiten de generación en generación, y que por su fuerza y cumplimiento adquieren carácter de ley en las comunidades y pueblos,se puede decir que son el alma de nuestras poblaciones, por cuanto sirven para darles unidad y sentido de responsabilidad social y comunitaria, porque en su realización se afianza el origen nuestro y se rinde homenaje a quienes nos dieron raíces de pueblo con origen y destino.
Muchas de nuestras tradiciones tienen origen prehispánico, que se fortalecen con la conquista y la llegada de visiones en ocasiones paralelas de la vida y de la muerte.
Y en ese terreno, de nada han servido los intentos de gobiernos por destruir esas tradiciones, porque el poder en manos de determinados personajes es temporal , son modas que pasan y que muy poca mella le hacen a las tradiciones nacionales como LOS DÍAS DE MUERTOS, LA FIESTA DE LA GUADALUPANA, LOS NACIMIENTOS, LAS POSADAS, LA SEMANA SANTA, LA MISA DE LOS DOMINGOS, LA COMIDA REGIONAL QUE TIENE CADA ESTADO, LA MÚSICA DE MARIACHI, entre otras.
Se dice “es la costumbre”, para darle valor de tradición, de ley popular; surgidas de la legislación aprobada por la gente de la calle, por las familias del país, porque así lo deciden y lo aprueban las familias y lo cumplen en la medida que tienen oportunidad.
Se corrió el rumor que algún legislador de esos que abundan, que proponen lo que se les ocurre para desquitar un sueldazo que no cualquiera tiene, propuso la idea de impedir la colocación de nacimientos en lugares públicos y más si son recintos oficiales, porque en México hay división entre iglesia y estado, y por esa razón dijo que era hora de dejar fuera los nacimientos.
No fue lejos por la respuesta, y lo que se dijo es que en ese caso también se tendría que acabar con las vacaciones de Semana Santa y de Navidad, nada más que se tenía que ver quien le daría esa “brillante” medida a los millones de mexicanos que tienen en esas tradiciones una manera de unir a sus familias y de estrechar los lazos de afecto entre padres e hijos, entre hermanos y amigos, aprovechando la celebración de esas tradiciones que le dan sentido de comunidad al pueblo en el núcleo de toda la sociedad que es la familia.
Son las tradiciones
En nuestro estado de Hidalgo hay muchas tradiciones como EL XANTOLO, sobre todo en la Huasteca, donde es ley que se cumple cada año y que no requiere de un permiso para llevarse a cabo, porque es la propia gente la que se da ese mandato por el amor a sus muertos.
Y ni se diga lo que se refiere a la comida, que se vuelve una sabrosa tradición casi en cada pueblo del estado, porque si algo tiene Hidalgo es la variedad de comida como expresión de creatividad y de ingenio, para aprovechar todo lo que se puede comer con platillos que han ganado concursos nacionales por su originalidad.
EN POLÍTICA había una hermosa tradición que era SER GENTE DE PALABRA, cuando la palabra tenía el carácter de compromiso que se cumplía siempre. Pero la palabra ha perdido fuerza, y se ha convertido en un caminado de mentiras y de engaños en que se dice una cosa y se hace otra.
Es muy difícil creerle a un político, porque ya se sabe que en campaña se promete todo para no cumplir casi nada.
Simplemente con que le devolvieran su valor a la palabra, estaríamos en el camino de ver renacer esa hermosa tradición de LA GENTE DE PALABRA.
