
Después de 26 años aplicando el horario de verano, a partir de hoy, en la mayoría de los estados del territorio mexicano, se regresa el horario normal, al retrasar una hora el reloj, para iniciar con el horario de invierno.
Cabe recordar que el horario de verano fue implementado por primera vez el siete de abril de 1996, durante el sexenio de Ernesto Zedillo, con la finalidad de aprovechar al máximo la luz del sol y reducir el consumo de energía eléctrica.
Antes de aplicarlo en toda la República Mexicana, solo se llevaba a cabo de Baja California Norte, con las mismas fechas de inicio y final que los países de Estados Unidos y Canadá, es decir, desde el primer domingo de abril y hasta el último domingo de octubre.
Ahora, después de más de dos décadas, el pasado 26 de octubre el Senado de la República turnó al ejecutivo federal el dictamen por el que se deroga el horario de verano, previo a la votación en la cámara de diputados, en donde 445 diputados federales votaron a favor, ocho en contra y 33 se abstuvieron de sufragar.
El argumento de la iniciativa se basa en que el cambio de horario provocaba alteraciones biológicas, psicoemocionales y sociales, como somnolencia, irritabilidad, déficit de atención, concentración y memoria.
Es importante señalar que la iniciativa presenta excepciones, entre ellas, que no será aplicado en 33 municipios fronterizos, con el propósito de no afectar el intercambio comercial.
Además, también se otorga la facultad a los congresos estatales para elegir su propio horario previamente consultado a la población y presentando una iniciativa ante el Congreso de la Unión.