
La tarde de ayer se registró el hallazgo de un muro novohispano posiblemente proveniente del siglo XVIII, en el arroyo vial de la calle Ignacio Comonfort, una de las avenidas más concurridas del popular barrio de La Lagunilla, Ciudad de México. El descubrimiento fue realizado por la Secretaría de Cultura de México a través de Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Desde hace más de un mes, un equipo de arqueólogos sigue los trabajos de las cuadrillas de la Secretaría de Obras y Servicios y del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), para la renovación de pavimentos, rehabilitación de alumbrado público y sustitución de drenaje, entre otros trabajos, debido al alto potencial histórico y arqueológico de la zona.
Juan Carlos Equihua Manrique, coordinador del salvamento arqueológico explicó que las tareas de sustitución del drenaje permitieron descender hasta 2.50 metros de la superficie y hallar elementos arqueológicos con más años de antigüedad y sin perturbaciones, tal como sucedió con este muro localizado en las inmediaciones del Centro Social y Deportivo Guelatao.
El arqueólogo especificó que la pared se encontró a 60 centímetros de la superficie y tiene aproximadamente un metro de altura.