CINE DE HOY
Una de las curiosidades del XX Festival de Diversidad Sexual en Cine y Video (Festival Mix), que se exhibe en la actualidad en la Cineteca Nacional, es Un ovni sobre mi cama, cuarto largometraje del argentino Pablo Oliveiro, el creador de Cine Tomado.
El filme realizado en el 2011, muestra un futuro nebuloso, muy al estilo del Alphaville de Jean Luc Godard, en más que sofisticados aparatos se utiliza la imaginación para sugerir una sociedad totalizadora y tecnogilizada.
En esa ciudad del futuro, solo las personas con trabajo tienen derecho a permanecer en la ciudad, y el resto son relegados a los suburbios.
Las patrullas de robots controlan los papeles y la identidad.
El personaje interpretado por Eric Calzada, es un expertos en cartografía, que de la noche a la mañana se encuentra sin trabajo, pues las autoridades han decidido suprimir su departamento.
Para poder mantener su residencia en la ciudad, el cartógrafo deberá convertirse en espía para tratar de capturar a los miembros de la resistencia que luchan en la clandestinidad.
Además existe una xenofobia contra los extraterrestres.
El aprendiz de espía deberá rentar su cuarto a un recién llegado (Martín Córdoba), que resulta un alienígena con el que sostendrá un tórrido romance.
El mayor mérito de Oliveiro es que consigue mantener el interés del espectador durante dos horas, con ínfimos recursos y escenografías de cartón.
Un ovni sobre mi cama resulta pues una curiosa muestra de ciencia ficción gay, un género que ni siquiera sabíamos que existía.