Morena, ya pasó el malogrado asalto de las tribus

De manera natural, las listas de aspirantes a la candidatura de Morena al gobierno de la entidad empiezan a depurarse, no por voluntad de las camarillas o tribus que tienen en sus manos los destinos de ese partido en la entidad, sino del sentido común que ha devuelto un poco de la razón perdida a la única estructura existente en el partido presidencial, que es la dirigencia nacional con todo y sus asegunes y proceder a veces tan cuestionable.

La tan traída y llevada apertura a las bases morenistas para que participaran en la selección de sus diez notables militantes, sólo provocó el intento patético y lamentable de camarillas que adquirieron a través de su poder económico fuerza en Morena, de querer imponer un listado en que se observó como intención fundamental echar fuera al senador de su partido, Julio Menchaca.

A cambio colocaron a incondicionales que resultaba evidente no tenían posibilidad alguna, primero de alcanzar la candidatura, y luego ganar la elección del 2022, como no fuera que se repitiera el milagro de San Peje, que ya les permitió llevar verdaderas joyas a la Cámara de Diputados federal.

Sin embargo, las aguas vuelven a su nivel, y poco a poco se aclara la situación en que veremos cómo salen de la competencia, y de manera definitiva personajes no solo grises y que obedecen a intereses de su grupo o camarilla política, para centrarse la competencia entre solo dos personajes, un hombre y una mujer, o bien recurren a la figura del Candidato de Unidad, ante el avance que esta posibilidad ya tiene en el PRI, su principal contrincante.

Las aguas pues, vuelven a su nivel, después que no pocos morenistas, o neo morenistas de la entidad, se exhibieron solitos al abrirles las puertas para hacer listas, donde quisieron pasarse, eso sí, de listos.

Mil gracias, hasta mañana.

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@JavierEPeralta