
El regreso de Mascarita
Matando cabos de Alejandro Lozano, fue uno de los thrillers nacionales más exitosos del 2004. Resulta bastante sorpresivo que 17 años después se haya filmado una secuela: Matando Cabos 2. La máscara del máscara, que se ha estrenado en Amazon.
El guión de Raquel Aedo y Rosa Clemente García, arranca con la muerte del Máscara original (José Angel Nájera), en un atentado explosivo en el gimnasio de René (Joaquín Cossío), quien sigue odiando que le digan Mascarita.
Este se había distanciado de su padre al fracasar su carrera y por ello ni siquiera quiere ir al velorio, donde se entera que la legendaria máscara de su padre ha sido robada, por los esbirros del doctor Orloff (Carlos Aragón).
Con la ayuda de su guardaespaldas Tony el caníbal (Silverio Palacios), René promete recuperar la máscara.
Se trata pues de una parodia de las cintas de luchadores, no tan lograda como su antecesora. Algunos de los participantes originales como Pedro Armendáriz y Jacqueline Voltaire ya han muerto, y otros como Tony Dalton, han emigrado a Hollywood.
Así pues el peso mayor recae en Cosío y Palacios, y en Gustavo Sánchez Parra y Rocío Verdejo, como una incorrecta políticamente pareja de amantes.
Así pues esta segunda parte resulta mayormente decepcionante, sin el encanto de la primera, pese al oficio de Cosío y de Palacios, que son lo único rescatable de la cinta.