Alumnos de la Universidad Politécnica de Tulancingo (UPT), reportaron que a media semana, conductores de la línea de colectivos, que otorgan servicio hacia la institución, agredieron a un taxista que quiso levantar pasaje luego de llevar un viaje particular hacia este lugar; por lo cual, lo obligaron a bajar a los estudiantes.

Al notar lo anterior, los transportistas de la zona rodearon al vehículo, señalando que no permitirían el ascenso de pasaje a taxis que realizan servicios particulares, obligando a los jóvenes a descender de la unidad. 

Al respecto, Jaime Luqueño Leyva, dirigente de los transportistas, justificó las acciones de los choferes bajo el argumento de que los taxis prestarían un servicio como colectivas hacia la zona, lo cual no está permitido, de acuerdo al permiso que se otorga para prestar el servicio.

Esto obedece también a una forma de convencionalismo implícito, en el cual los taxistas pueden brindar el servicio particular a cualquier lado; sin embargo, deben regresar vacíos a su destino, sin mermar el número de personas que levantan los colectivos.

Luqueño Leyva declaró que esta situación no es la primera vez que ocurre, por lo que insistió en señalar que en la zona sólo pueden prestar el servicio las camionetas que prestan el servicio colectivo.

Tras el incidente, aseguró el líder transportista, un grupo de taxistas agredió a transportistas de la ruta, golpeando unidades a la altura de la central de abastos municipal. 

Sin embargo, declinó en presentar denuncia por la agresión, señalando que en breve buscará reunión con el representante de taxistas para establecer las zonas de trabajo tanto de éste tipo de transporte, como de las unidades colectivas de pasajeros.

Por su parte, los estudiantes manifestaron su descontento por los hechos, señalando que el actual sistema de transporte colectivo es deficiente, tanto por el estado de las unidades, como por lo forma en que los conductores prestan el servicio.

De hecho, declararon también haber sido víctimas de amenazas en los casos donde compañeros que tienen auto particular, ofrecen transporte a sus compañeros, que esperan la salida de alguna unidad de servicio público.

Por tal motivo, demandaron a las autoridades académicas intervenir para mejorar el servicio, e incluso hacer uso de dos unidades de la UPT, las cuales llevan mucho tiempo varadas, sin tener ningún tipo de uso.