Pese a la pandemia y la veda electoral por la consulta popular del próximo domingo 1 de agosto, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, llevó a cabo un acto “cerrado” en Veracruz, que en realidad fue público para informar sobre acciones de mejoramiento urbano en esta ciudad.

Desde que descendió de su camioneta, el mandatario sintió el afecto de sus paisanos jarochos y su evento prácticamente se convirtió en un acto como aquellos de sus días de campaña por la Presidencia.

“Me da mucho gusto estar aquí y vamos a correr el riesgo porque no debemos de congregarnos, porque todavía no pasa desgraciadamente la pandemia y también que no se pueden hacer actos públicos porque hay veda electoral, dentro de ocho días habrá una consulta y no se pueden dar a conocer acciones del gobierno”, dijo.

Detrás de una valla metálica, desde las ventanas de sus casas, en los portones, aplaudieron y festejaron al Presidente que dijo es “jarocho” y “choco” por herencia de sus padres. En su mensaje, el titular del Ejecutivo pidió no perder la fe porque “vamos a salir adelante”.