Así sería EU con un Presidente «antisistema»
- De cómo el magnate promete regresar a los dorados años 50
En el campo económico nadie sabe cómo logrará convencer a China para que no devalúe su moneda o falsee las cuentas de resultados, o cómo revertirá el flujo de capitales y la imparable deslocalización de empresas. Si está clara su intención de dar vía libre a la perforación del Ártico en busca de gas y petróleo.
Donald Trump acaudilla a las masas bajo un revuelo de tuits incendiarios, incorrección política, salidas de tono y grandes aspavientos. También mediante la invocación de un pasado legendario, el del EU posterior a la II Guerra Mundial. Una etapa de grandes coches, gasolina barata, trabajos bien pagados y confianza en el futuro, algo que sus partidarios, clase trabajadora y blanca –en franco retroceso–, contempla con idealizada nostalgia.
Destacan sus promesas de levantar un muro de más de 3.000 kilómetros en la frontera con México. Ya hay uno, de 1.000 kilómetros, pero no es suficiente. La suya será una construcción ciclópea. Estrangulará, dice, el flujo de inmigrantes ilegales. Los costes correrán a cargo de México.
También promete enviar de vuelta a once millones de indocumentados, miles al día, en una operación que requeriría una inversión multimillonaria. Por no hablar de las pérdidas económicas que la medida generaría en sectores como la construcción, la hostelería o la agricultura, principales empleadores de los inmigrantes sin papeles.
Eso sí, tiene razón al detectar asombrosas ineficiencias en el sistema que controla la llegada de inmigrantes a EU por vías convencionales, esto es, previo paso por las ventanillas de inmigración. Huelga decir que Trump considera lamentable el «Obamacare», que procederá a laminar no bien alcance la Presidencia.
El multimillonario, no sin antes acusar a los actuales dirigentes de «vagos, inútiles e imbéciles» (lo ha repetido tantas veces, con añadidos que van de «ineptos» a «blandos» e «idiotas», que ya parece un mantra), alardea de que persuadirá a Putin para que deponga su actitud en Siria y acepte negociar una salida honorable al conflicto en Ucrania. De paso boicoteará el Acuerdo de Asociación Transpacífico. Sin olvidar que pretende renegociar el pacto alcanzado por la comunidad internacional para el desarme nuclear de Irán.