2 canijos se les escaparon, usaban pelucas, para que no los identificaran, un comerciante fue el que pago el pato. Tres de los cinco integrantes de un a peligrosa banda de delincuentes, fueron agarrados en un operativo de los agentes investigadores. Se habían llevado secuestrados al dueño de un establecimiento de materiales para construcción, a su gato, y a otros familiares.

Durante el robo dispararon varios plomazos, dos personas resultaron heridas al no dejar entrar a los mendigos ladrones, a la casa del empresario materialista y llevarse todo el dinero que ahí guardaba. Los delincuentes para no ser reconocidos, utilizaban pelucas, con lentes oscuros, que se parecían a Omar Chaparro, que sale en la televisión,

Al enterarse el secretario de Seguridad Publica, dijo que se fijaran bien si tenían buenas nalgas, o era disfraz. Esto sucedió en la comunidad de Ohutiapan municipio de Xochitiapan, hicieron un operativo, para localizar a los maleantes, ya tenían asoleada la región, la gente vivía con miedo, hasta, que llegaron a la huasteca hidalguense tropas especiales, disfrazados de Agentes investigadores, y montaron a su caballo (perdón) montaron la cacería de los delincuentes.

Se dijo que por el escándalo de los balazos, y los gritos de la gente, los vieron que se es caparon en un a camioneta Ford F-150 color blanco, placas de circulación HH-4311 por ello se puso el dispositivo de localización y búsqueda, y salieron todos. Los delincuentes al ver que los seguían se detuvieron y “Vieja el último” salió corriendo los 5 cada uno por su lado.

Los uniformados corrieron atrás de ellos, y alcanzaron a tres, se identificaron como Omar Arturo Sánchez Sosa, Alfonso Morales Hernández, y Bonifacio Ramos Hernández, de 20, 40, 26 años. En el camino iban regando las ropas de disfraz, como la peluca, vestido faldas, bolsas de mano, gafas, y uno de ellos tenia un Colt calibre 38 súper abastecida, y varios cartuchos útiles.

Dijeron que ellos son los que robaron y secuestraron al dueño, al empleado y a otros familiares, que lo tenían planeado como iban actuar, vieron salir al empleado en una motocicleta, fueron atrás y lo agarraron, le sacaron la sopa cual era el numero del teléfono de sus padrón y le hablaron “Tu empleado se acaba de dar en toda la madre, es necesario que vengan, lo mas pronto posible porque esta a punto de estirar la pata” El patrón salió del negocio en su camioneta.

Llegando los agarraron, lo amarraron de las manos y de las patas, y se regresaron a su negocio donde tenia la pachocha, se soltó la balacera y las personas que sufrieron heridas no les podemos decir sus nombres, las llevaron al hospital de la región. Los detenidos fueron llevados al Ministerio Publico acusados de secuestro, lesiones, robo y chismosos.

Los agentes andan buscando a los dos que escaparon, saben que pronto los van agarrar, porque sus compinches, explicaron como se llemaba su jefa, y los nombres de sus viejas, que viven en la colonia del municipio de Huejutla. “¿Y el botín? Dijeron que el señor traía puestos los dos.

LOS VÁNDALOS.

En distintos puntos de la ciudad, colonias, barrios, se han soltado los vándalos, que la policía no ha podido controlar, en está ocasión le toco atacar a los “Chintarrias” del barrio de “Las Lajas” Georgina López, de 51 años de edad, tiene la desgracia de vivir en la calle de Pedro Escobedo 303.

Dijo al Agente Social, que como a las 4 de la tarde, del día de ayer, al salir de su casa, la atropelló un borracho, prensándole una pierna entre su carcacha y la pared, la mujer gritó como Tarzan, por el dolor que sintió, se escuchó a varios kilómetros a la redonda.

Espanto a los perros que no dejaban de labrar. Salió el hijo del borracho que le dicen “El Chango” que también andaba iguanas ranas, le dijo que se callara el hocico, que no fuera escandalosa que no le había pasado nada. Jorge Monroy, de 25 años, hijo de la señora, le fue a parar los tacos al “Chango” pero como es de pocas pulgas le puso un madrazo en la cara, otro en el lomo.

Salió la familia del borracho, a la señora y a su hijo se les apareció el diablo, se fueron encima a patín y madrazos, jalones de greñas, piquetes de ojos y les dieron un faul, no sentían lo duro si no lo tupido. Jorge, trato de defenderse y defender a su madre, comenzó aventar campanazos a lo loco, le puso uno en el hocico al “Chango” que lo tumbo, esa fue la gota que derramó el vaso, porque les siguieron tupiendo duro.

El que estaba que echaba chispas y se agarraba el hocico era “El Chango” que le grito abierto le dijo al hijo, de la atropellada, que lo iba a matar, y se metió a su casa, a buscar un cuchillo, por eso la su jefa, brincando con una pata, fue a poner su queja, al Ministerio Público, le dijo que los conoce y es capaz de darle chicharrón a su hijo, son muy desmadrosos, y tienen miedo, son sus vecinos, solo una pared, los separa viven a la otra puerta de su casa.

POR FIN ENCONTRÓ A SU VIEJO.

María de Jesús González, con domicilio en el callejón del Minero, del barrio del Mosco, fue a denunciar ante el Ministerio Público, de Seguridad Pública, que su marido Juan López Melo, no había llegado a su casa desde ayer, para que lo buscaran, tenía 24 horas de perdido. Dijo que su esposo trabaja en la fabrica “Ánfora” llevan 5 años de casados tienen 3 niños, que su señor no tiene ningún vicio, siempre de su trabajo a su casa, tampoco amistades, es un autentico gato ratonero.

Le dijeron, que le fuera a preguntar al comandante de guardia, si no estaba en la galera, a los agentes investigadores, si no lo tienen en el calabozo, le dijo que ya había ido pero no esta, le contesto que por el momento no podían hacer nada, que fuera después de las 72 dos horas, que lo buscaran por el corredor de las caricias, en los bares, porque luego se van con alguna vieja, y la policía los andan buscando, que les diera el domicilio correcto y ellos se encargaban de darle noticias cuando lo encontraran.

Cuando María de Jesús, iba subiendo por la calle de Ocampo, de casualidad escuchó una plática de dos señoras, de un albañil, había soltado el bote de mezcla desde la azotea y le cayó en la cabeza a un señor que pasaba por el lugar. La señora, sintiendo un presentimiento, le pregunto, que como era al que le cayó el bote, le contesto que no saben porque estaba sangrado y lleno de mezcla, le dijeron que fue ayer como a las 5 de la tarde, que el hombre era un chaparro con cachucha, que se lo había llevado la Cruz Roja.

La mujer, fue a la Cruz Roja, le dijeron que habían levantado a un desconocido, lo llevaron al Hospital General. Al llegar preguntó por el desconocido, la llevaron a verlo, ella contenta dijo que era su viejo. Pero el, no la conocía había perdido la memoria por el madrazo, ella lo quiso besar y al hacerse a un lado se cayó de la cama y se pegó en la choya, recuperando la razón.

Platicaron un momento ella fue a dar avisó a la Policía Ministerial que ya lo había encontrado, pasó a la iglesia dar gracias, dijo que desde el momento que salga en lugar de usar cachucha se va a poner un sombrero de bombero

SE SENTIA MUY VALIENTE.

Eduardo Rivero García, se dio sus buenos toques de marihuana, y le valía madre quien se le pusiera en su camino. Llevaba un rifle de municiones en el hombro como el conejo Blas, y 2 cuchillos cebolleros uno en cada mano, caminaba con la vista al frente, por ahí se le cruzo un Policía de la Bancaria, llamado Manuel Lara Meneses, a quien le apuntó con el rifle y le quitó sus pertenencias, le tiro de tajazos con el cuchillo que el policía brinco como chapulín, y se echo a correr.

Eduardo pasó por una gasolinera muy cerca de Tizayuca, y los puso contra la pared, les robo la cuenta. El rifle parecía de verdad. En esos momentos pasó por ahí un policía de Seguridad Pública, el ladrón le apuntó con el rifle, el oficial se le aventó como luchador dándole un tope que los 2 cayeron al suelo rodaron y forcejearon, pero el policía le quitó el rifle y vio que era de municiones, y le pegó en la cabeza.

El delincuente le mentó la madre, lo reto a que se dieran un trompo a mano limpia, tiro los cuchillos y se puso en guardia, y daban vueltas como gallitos de pelea el policía en 2×3 le dio en la madre. Por su radio llamó a sus compañeros y llegó la patrulla y cuando lo iban a subir al delincuente le entró el segundo aíre y comenzó a repartir golpes, se les echo a correr, agarro los cuchillos y les dijo que le entraran si eran tan machos.

Uno de los policías le aventó su chamarra y otro se le fue encima se cayó y le echaron bolita, lo subieron a madrazos a la patrulla y como no se controlaba lo metieron a la galera, donde los detenidos lo pusieron quieto a chilacatazos. Están haciendo las investigaciones porque saben que Eduardo es un pájaro de cuenta, mientras lo tiene muy bien vigilado le quitaron el cinturón y los zapatos porque se quería ahorcar. Lo único que hasta ahorita saben es que vivía en la colonia de Tepojaco en Tizayuca Hidalgo.

ROBAN EN SU COCHE.

Samuel Ramírez Pérez, dejo su coche estacionado afuera de su puerta en la calle de Primero de Mayo, de la colonia Morelos, mientras se aventaba una sopita de caracol, cuando de pronto escucho un golpe pero no dejo de comer pensó que se habían dado un llegue dos coches en la calle. Terminando su ración fue al baño y después se despidió de su vieja pues tenía que ir a la ciudad de México.

Al abrir la puerta se le hicieron los ojos cuadrados, y se le pararon los pelos del espinazo al ver que le habían roto el cristal de una ventanilla y se habían llevado un portafolio con 20 mil pesos y documentos cobrables, Se le ocurrió subirse por la Barranca Blanca, y le preguntó a un señor que si no había visto pasar a un señor con un portafolio negro.

Le dijo que si, y le señalo que se fue por Camerino Mendoza, Samuel camino rápido fue mucha su desesperación al ver que el que llevaba su portafolio se subió en un taxi. Corrió a todo lo que le daban las patas pero no lo alcanzó, pasó otro taxi se subió y le dijo al chofer que siguiera al coche que iba a delante.

Por la Escuela Pedro María Anaya los detuvo el semáforo, y el taxi con el ladrón se bajo por Gómez Pérez. En el semáforo de la calle de Cuahutémoc se detuvieron Samuel se bajo y se paró adelante del taxi abriendo los brazos gritando pidiendo auxilio, el ladrón al verlo se quiso bajar pero le apachurró las patas con la puerta y no le dejó salir hasta que llegó la policía. Se los llevaron a los 2 y ahí se pusieron las cosas en claro. Samuel salio con su portafolio, y el ladrón se quedo encerrado.

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