Siempre que miro el viejo fax Panasonic arrumbado en un cubículo pegado al jardín interno de la redacción, todavía conectado a una de las extensiones en espera de la llamada que pida tono para despertar de su letargo, descubro que además de los hijos que no dejan de crecer, la tecnología aplicada a la información nos da testimonio constante y definitivo de que el tiempo pasa y que al final de cuentas solo perduran los testimonios que nos puedan dar noticia de lo que sucedía, por ejemplo, un 8 de febrero de 2005, fecha exacta en que salió a la luz pública el primer ejemplar de su DIARIO Plaza Juárez.
Finalmente, en un periódico diario solo se tiene posibilidad para escribir “La Historia de Cada Día”, lo que ha sucedido en 24 horas exactas hasta ver el trabajo que realizan los jornaleros-reporteros-fotógrafos en el campo de los sucesos cristalizado en páginas impresas siempre cuidadas con pasión por editores, encargados de cierre y por supuesto diseñadores.
Se trata a estas alturas de una nostalgia eterna por lo tangible, lo que se puede tocar y oler en las planas que salen de la rotativa Goss Urbanite, y si le digo que quienes practicamos esa vieja tradición hoy esperamos con ansia ser vacunados contra el Covid-19, ya entenderá que hablamos de edades no menores las seis décadas.
Sin embargo, la mayor parte del equipo de redacción que nos ha acompañado a lo largo de estos 16 años son jóvenes, es decir generaciones que crecieron en el mar de la supercarretera de la información, la internet, y que dominan el ejercicio de las publicaciones electrónicas, aunque con la experiencia que da trabajar también para la versión reina de nuestro Grupo Editorial Aljibe, que es el periódico impreso PLAZA JUÁREZ.
Usted, lector, lectora, lectores, tiene al final de cuentas una opinión muy clara sobre nuestro trabajo. A 16 años de que esta embarcación se hizo a la mar, le aseguro que redoblamos la ilusión de poder contar la historia más importante de cada día, que es la de usted, de él, de ella, de nosotros todos. Es un largo y sinuoso camino como decía la canción de los de Liverpool, pero que andamos con gusto, con la vocación cierta porque hemos podido confirmar que practicamos el oficio más bello del mundo.
Sostenemos que, en estos tiempos nuevos de las plataformas digitales, como nunca el periodismo debe sustentarse en la divulgación de información confirmada, y bajo ninguna circunstancia por la prisa de ganarle a la competencia, lanzar una nota que después se comprueba no tenía ningún sustento.
Caminamos hacia los 17 años de vida con el eterno agradecimiento al ciudadano que confía en nosotros, a nuestros anunciantes, a cada uno de los que integran la empresa que da vida al DIARIO Plaza Juárez, y que hemos logrado conformar una verdadera familia en la que nos interesa y preocupa lo que cada uno de nuestros compañeros y compañeras vive día a día. Gracias a todos por su solidaridad en tiempos tan difíciles.
Aquí estamos, aquí seguiremos porque hacer periodismo es nuestro destino y vida.
Después de todo el viejo fax Panasonic, tarde o temprano recibirá la llamada que le pida tono para imprimir el saludo de Dios.
Gracias siempre.
L.P. Javier Enrique Peralta
Presidente y Director General del DIARIO PLAZA JUÁREZ
