
(EFE).- Cuando Adele escribió los primeros versos de ‘Rolling in the deep’ en el sótano de un restaurante chino de San Francisco no sabía que, años más tarde, su disco ’21’ le cambiaría la vida y se convertiría en un clásico atemporal de la historia de la música, batiendo todos los récords.
Sin más pretensión que la de hablar del amor sin filtros y dar rienda a los sentimientos provocados por una reciente ruptura, la gran capacidad compositiva de la cantante hizo el resto, convirtiendo a ’21’ en una obra maestra del pop contemporáneo que, una década después de su estreno, sigue siendo el disco más vendido del siglo XXI.
La combinación resultante de las melodías clásicas y atemporales de ’21’ como “Someone like you”, el blues sureño que se atisba en “I´ll be waiting”, o la bossanova que aporta color al “Lovesong” de The Cure, junto con una producción de calidad, y unas letras con las que todo el mundo pudo sentirse identificado… fue todo un éxito.