Campesinos del Ejido de Xitejé de Zapata se manifestaron ayer en el Cereso de Tula, para exigir se castigue a los tres presuntos responsables del robo del cableado y equipo eléctrico del pozo San Isidro que, recordaron, sufrieron hace algunos meses y que asciende a más de un millón de pesos.
Los campesinos miembros de la Unidad de Riego de Xitejé de Zapata, encabezados por su presidente, Ignacio García Montiel, señalaron que en tres ocasiones han sido víctimas del robo del cableado, equipo eléctrico y de bombeo del pozo San Isidro que se ubica en el kilómetro 5 de la carretera Tula-Xochitlán de las Flores y que en la última ocasión el velador del lugar identificó a los responsables, mismos que comentaron fueron detenidos, pero que temen puedan ser puestos en libertad.
Los campesinos manifestaron que como consecuencia de los robos de los que han sido objeto interpusieron las denuncias correspondientes y que tras las investigaciones fueron detenidas tres personas que, en su momento, fueron señaladas por el velador del lugar, pero que de acuerdo a la declaración de las personas señaladas éstas podrían ser puestas en libertad, por lo que piden al Gobernador se aplique la ley y que los atracos que han sufrido no queden impunes.
Precisaron que esta última vez que les robaron se llevaron una fuerte cantidad de cable y equipo eléctrico que tenían en la Unidad de Riego, además de que desmantelaron el tablero de la bomba y del transformador.
Ignacio García dijo que en lo que va de la administración del Comité que encabeza, en dos ocasiones les han robado fuertes cantidades de material eléctrico, siendo en febrero un aproximado de 600 mil pesos, y que en junio se llevaron otros 135 mil pesos, pero que con anterioridad la Unidad de Riesgo ya había sufrido un robo cercano a los 300 mil pesos, por lo que en total han sufrido un atraco de poco más de un millón de pesos.
De ahí que exigieron se castigue a los responsable y se repare el daño a los campesinos, quienes han sufrido la pérdidas de sus cultivos como consecuencia de la falta de riego al no contar con energía eléctrica.
Su inconformidad la expresaron en las afueras de las oficinas del Juzgado Segundo, donde se llevaba a cabo la audiencia relacionada con la causa penal 116/2015 y donde los imputados realizaban su declaración.
Finalmente, los campesinos solicitaron el apoyo de la Secretaría de Agricultura para poder acceder a recursos extraordinarios con los que puedan adquirir los materiales eléctricos para reactivar las labores del campo en las 155 hectáreas que riegan con el pozo de San Isidro.