(En 115 días registro de candidato a Gobernador)
ANTES DE QUE MUERA EL PAVO NAVIDEÑO
HABRÁ CANDIDATO DEL PRI
Estos días de fin de año que para todos son espacios para preparar las fiestas familiares correspondientes a estas fechas, con toda su carga de buenos sentimientos y de nostalgia, en el PRI de Hidalgo tendrá un algo especial por todo lo que está en juego rumbo a la madre de todas las elecciones del 5 de junio del 2016, y que no es cosa de dejar a la suerte. Lo central será la elección de su candidato (a) que ya no puede tardar más, por todo el ambiente de tensión que se está provocando, y que da pie para un escenario de real o supuesto enfrentamiento de los aspirantes con modales no muy decentes, y ya con actitudes de bravuconería que a nada bueno conducen y que pueden atentar contra el mismo partido, que es lo que desean desde el fondo de su alma los opositores que se pasean a las afueras de las murallas tricolores, con la esperanza de que haya golpes al interior y algo bueno salga para ellos. Sin embargo, el gran brujo nos dijo en plan de profecía: “Antes de que muera el pavo navideño, habrá candidato-a en el PRI”, que quiere decir que para las fiestas de navidad ya habrá, aunque se hará oficial más tarde, para quitarle presión al proceso y afianzar la unidad, que es la clave para el paso triunfador del PRI. Porque ya se sabe que en el partido del Bulevar Colosio antes de la selección del abanderado puede haber codazos, empujones y hasta golpes, pero una vez que se pronuncia el nombre del ganador, como en el caso del Rey León, todos inclinan la cabeza en un gesto de disciplina que garantiza la unidad y el camino de victoria finalmente.
Por eso son importantes estos días en la casa tricolor, y la actividad que se lleve a cabo con Meléndez a la cabeza en perfecta coordinación con las dos torres de poder que tiene el priísmo en el gobernador y el Secretario de Gobernación en una acción conjunta manifestada por el propio jefe del Ejecutivo estatal cuando dijo “Vamos juntos”, lo que quiere decir que ni hay divisiones ni enfrentamientos para decidir lo que se deba decidir para el cambio.
En todo caso es el tiempo el que urge la decisión, y el que con su manecilla a todo ritmo como tambor de guerra marca paso veloz para decidir seguramente con el concurso de Manlio Fabio Beltrones en su calidad de Presidente nacional del partido, y el juicio final del Presidente de la República.
Los enterados de este asunto señalan que antes de que el pavo tuerza el cuello y sea lanzado al horno por las expertas manos de la cocinera, se habrá decidido el nombre del abanderado o abanderada del partido tricolor, y que por enero se dará a conocer o se filtrará para iniciar los movimientos que se deban hacer.
Eso dicen.
Es como la profecía del guajolote navideño, que tiene mucha lógica.
Así que cada que vea usted un pavo, piense que en el PRI los tiempos se mueven al ritmo de la suerte de los pavos.
Quién lo hubiera creído.
El otro tema nada sencillo es el del equipo de Meléndez.
La nueva dirigencia del partido debe elegir a su equipo de trabajo con lupa, pues la batalla que se avecina le exige un equipo como el de Leónidas, que con 300 guerreros pudo contener en las Termópilas, las puertas calientes, a todo un ejército de Jerjes, en una gesta que la historia recoge con respeto por el valor de los espartanos que dieron su vida por su patria. Así MELÉNDEZ debe tener el buen ojo de elegir a quienes le acompañarán en esta batalla, con tan buen tino que cada uno de ellos debe ser capaz de liderar cada una de las carteras donde tenga algún encargo.
Se da por descontado que habrá cambios y que como sucede en cada nueva administración, el que llega lo hace con SU equipo de trabajo a efecto de darle su propia personalidad y su propio estilo; de tal manera que los que fueron equipo de Crespo deben aceptar que el cargo que tenían no era para siempre, y que se acabó la oportunidad que se tuvo para trabajar en el partido y que llega la hora de entregar las oficinas, a más tardar en enero.
Lo que no se vale es que los que todavía no se van sientan que la gente que llegó con Meléndez los están atosigando en su trabajo, a lo mejor porque no son sus amigos de francachelas.
Dicen – y eso es en ese sentido- que algunos de los que dejarán de tener chamba en el PRI, desean que Crespo sean candidato por Pachuca y que gane la alcaldía para tener chamba segura en la presidencia municipal.
Eso dicen.
Así el panorama a unos días de que termine el año.
Cuando todo mundo piensa en la cena de navidad y de año nuevo, y en el PRI la gran tarea es darle al partido un candidato ganador y un equipo de trabajo a Meléndez que le garantice un trabajo que al final pueda llevarle a cantar victoria el 5 de junio.
