LE ROBARON A SU BEBÉ
Los robachicos regresaron a Pachuca partiendo leña, la mañana de ayer le quitaron a una mujer, su chiquito de un mes de nacido, la señora gritaba a todo pulmón, que los agarraran, la gente, por celular, llamó a la policía, que desplegó un fuerte operativo, se pelaron las viejas que se lo llevaron, pero los uniformados agarraron a uno de los robachicos.
Afortunadamente horas después, el operativo rindió frutos al capturar a uno de los responsables, dos viejas greñudas se escaparon en un autobús, localizaron la cobija del niño robado. Se dice que las señoras lograron salir de la ciudad en un autobús de la Central Camionera.
Dijeron en la procuraduría que los robachicos aprovecharon la ventaja que le llevaban a la policía porque la mamá reporto lo sucedido media hora después, cuando logró zafarse de las ataduras. Poco después de las 10 de la mañana de ayer se recibió un reporte de lo que había pasado, a través del número de emergencias 066.
Se pidió apoyo de ambulancias y patrullas en la calle del Ahuehuete, colonia El Tezontle de Pachuca, dijeron que en ese lugar se llevaron al bebé. Al acudir entrevistaron a Paula “H” de 25 años de edad, vecina del callejón de Terreros en el barrio El Arbolito, pero es originaria del puerto de Veracruz, donde hacen su nido las olas del mar.
Ella se dedica a hacer tortillas de comal en un local que tiene en la colonia Flores Magón, dos mujeres y un chango marango le dijeron que necesitaban que les hiciera 20 kilos de tortillas pero debía hacerlas en la calle Ahuehuete, en El Tezontle, porque habían invitado a unos cuates y se iban aventar unos tacos calientitos.
Ella les dijo que sí, la trasladaron en un coche de los metropolitanos, o chapulines, verdes y blancos, al domicilio que ya les dije, en un descuido le dieron un golpe en la cholla, le pusieron en la nariz y boca un trapo, que después se supo que era cloroformo, para dormirla, la amarraron de las manos y de la patas con cinta canela, y se llevaron al niño de un mes de nacido.
Se informó que la señora despertó moviéndose como si tuviera chincual, logró zafarse de sus ataduras, salió gritando como loca, al ver que no estaba su hijo, y pidió apoyo a la gente que pasaba por el lugar, también a la señora que es la propietaria del inmueble, en la calle de Ahuehuete 111, esquina con Roble, de nombre Rosa María, de 72 años de edad, los policías la interrogaron, les dijo a los agentes investigadores que unas personas le rentaron la vivienda el miércoles de esta semana, un día antes del robo del niño, las dos mujeres describieron cómo eran los robachicos, dos mujeres gordas, con cola de caballo y peinadas de chongo.
Comentaron que han de tener entre 30 y 35 años de edad, y un hombre gordo, chaparro, de cabello lacio. De volada armaron un operativo por todas las calles de Pachuca, se conoció por una fuente policíaca de investigación, que fue ubicada la camioneta Windstar en la que se encontraba una cobija azul, y fue detenido un hombre con las señas que les habían dado, estaba prieto como mojón.
Le sacaron unas fotografías, se las enseñaron a las dos señoras, que dijeron que ese fue el que le rentó la casa y el que contrató a la señora a que le fuera hacer las tortillas al domicilio. El tipo al verse perdido, dijo que sus cómplices escaparon en un autobús, los comandantes organizaron un operativo de localización y búsqueda, pero no lograron su objetivo.
La Procuraduría General de Justicia informó que activó la Alerta Amber, por el robo del bebé, en los Estados de Hidalgo, Tlaxcala, Puebla, Veracruz, Estado de México y Distrito Federal. Pasaron al robachicos con los agentes investigadores, que estarán como cuchillito de palo, hasta que confiese a dónde se llevaron a la criatura.
Paula no dejaba de chillar porque se habían llevado su chiquito, eso obligó a los agentes investigadores a ponerse la pila y agarrar a los ladrones, porque con sus gritos los había puesto nerviosos, poco después dieron la noticia, el matrimonio brincó de gusto cuando les dijeron que ya habían recuperado al infante robado, e iban tras los huesos de la responsable y una de sus compinches.
La criatura que se habían volado presentaba un cuadro de enfermedad por doce horas que lo tuvieron ayunando, y no le dieron su chichi. De inmediato al ser recuperado, lo trasladaron a que le dieran atención medica, y se la pasaron a su jefa para que le diera de mamar, y no se despegó hasta que las dejó secas.
Ayer, poco después de las 10 de la mañana, se lo devolvieron en forma legal a sus padres, pero vamos a saber qué es lo que verdaderamente pasó. Nuestro reportero estrella, que se mete por todos lados, se enteró que una de las dos mujeres estaba embarazada y por darle vuelo a la hilacha, tuvo que abortar y para detener a su chancludo viejo, ideó la forma de apoderarse de un recién nacido y meterle gato por liebre.
Le platicó a una vecina que trabaja en un bar, e hicieron el plan que comenzó montando vigilancia en el Hospital de la Mujer en Pachuca, para encontrar alguna parturienta que reuniera las características, pero no había ninguna. Mientras tanto, en menos de 12 horas, los agentes investigadores hicieron un relampagueante operativo, siguiendo pistas capturaron a la mujer responsable del robo del chamaquito, así como a su cómplice vecina, en el municipio de Zacualtipán, y siguen las pesquisas de los otros cómplices, los han buscado debajo de la tierra, han peinado dos cerros.
Para que estemos satisfechos de la nota, vamos a hacer una repetición de algunas cosas: el robo del niño se cometió de manera violenta, en la calle del Ahuehuete de la colonia el Tezontle, donde llevaron a la señora en un taxi, entre las dos mujeres y un hombre la golpearon y le pusieron en boca y nariz, un trapo con alguna sustancia que le hizo perder el conocimiento, la tiraron al piso y le dieron de patadas porque se resistía.
La dejaron atada de las manos y de las patas con cinta canela en el cuarto que habían rentado. En ese lugar llevaron a la víctima con engaños de que les hicieran 20 kilos de tortillas a mano y le iban a dar una buena lana. Poco después la señora recuperó el conocimiento, y su hijo no estaba con ella, salió hecha la mocha, gritaba como loca, que le habían robado a su bebé.
Llegaron los uniformados junto con sus hermanos los agentes investigadores, y realizaron su trabajo de inteligencia para que recuperaran al chavito. Para eso ya habían agarrado a un mono platanero que andaba con las viejas greñudas, y le sacaron la sopa, que las viejas se habían ido a la Central de Autobuses y abordaron uno, por eso la policía solicitó apoyo a otras entidades. Se montó un operativo de localización en los paraderos de los autobuses y se subían a buscar a las dos viejas y al niño.
Como a las 9 de la noche, alrededor de mas de 50 agentes se trasladaron a Zacualtipán, lograron ubicar, a las personas identificada como Ana y Yolanda, quienes llevaban a un menor con las mismas características, similares a las que les habían dado y rasgos fiscos del niño, que era muy chillón, y más que no le habían dado su mamila. Eso fue como a las 10 de la noche.
En determinada colonia de Zacualtipán los agentes recabaron información de que una mujer había dado a luz, de cuerdo a los testimonios y entrevistas, las condiciones del alumbramiento eran sospechosas. La mujer no contaba con ningún documento de alumbramiento y el supuesto padre, siempre sospechó del embarazo.
Dijo que no se le veía cansada y el bebé no parecía ser que era recién nacido, que ya estaba grande, además le dijeron que era una niña, y le salen con un niño, con tal información los elementos investigadores, aseguraron al supuesto padre. Le explicaron que ya estaba la Alerta Amber activada por un bebé robado en Pachuca, y lo reconoció como el que le querían meter como suyo. De esta manera, se confronta y ella terminó por revelar que se había robado el niño.
Los agentes investigadores fueron tras una meretriz que era la vecina cómplice, y fue detenida. En la primera hora del día de ayer, la fueron a buscar al bar donde ella le pone (pedon) donde ella trabaja, en su celular se encuentran mensajes que había enviado a su novio y a otra amiga suya, y así decía el mensaje: “ya no vengan a Pachuca en un buen tiempo”; y otro: “No se les vaya a morir el bebé”.
De lo que se dijo, quedó anotado en la carpeta investigadora, de acuerdo con las primeras investigaciones, la intención de las imputadas era incorporar al bebé a su seño familiar. Les dijo el agente del MP que no mamen.
ENGAÑARON A LOS GENDARMES
Les llamaron para decirles que los secuestradores se llevaban a una mujer, dándoles santo y seña. Un enorme operativo policíaco espantó a la población de Pachuca, nunca habían visto tantos gendarmes juntos, sólo se ven en los desfiles del 16 de septiembre, porque cuando buscan uno, no lo encuentran.
Una llamada al Centro de Control de Cómputo los despertó alertando a los azules, de que había un secuestro. Se unieron más de 20 camionetas patrullas y 60 efectivos, listos para jugarse el cuero, los municipales de Tolcayuca, Zapotlán y Pachuca se unieron, los estatales y los de la Coordinación de Investigación, buscando el paradero de la víctima.
Eran las 11 de la mañana, cuando se dio la voz de alerta para localizar una camioneta color negra, con vidrios polarizados, donde les habían dicho que llevaban a una mujer que había subido en la calle Vicente Guerrero, en la comunidad de San Pedro Huaquilpan, en Zapotlán de Juárez.
De volada se hizo un operativo con las corporaciones para localizar una unidad Liberty, donde llevaban a la plagiada, pero se dieron cuenta que todo se debió a las gracias de un tipo que se le conoce en el bajo mundo como “El Borrego”, que se dedica a distraer a la policía.
Por tal motivo, el despliegue policíaco no pudo saber que haya sido un levantón o plagio, lo que supimos fue que el comandante Pistolas encabezó el operativo pero luego, un jefe policíaco de Zapotlán, les pidió que no fueran a dar su nombre, que ya todos sabían que no se encontró nada, fue una vacilada. Sin embargo, se agradece la colaboración de los elementos que participaron en el llamado, y piden a los que llamaron que para la otra vez vayan a vacilar a su madre.
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