Las cochinadas en los Concejos
A poco más de 20 días de que fueran nombrados los Concejos Municipales Interinos, ya están dando mucho de qué hablar, no sólo por las cacerías de brujas que han comenzado unos, o la limpieza de terreno que están haciendo otros, sino por la forma del actuar de los que fungen como presidentes interinos ya que como lo dice el viejo refrán “el que no tiene y llega a tener, loco se quiere volver”.
La verdad es de pena ajena ver la forma en que se comportan muchos de los que presiden estos concejos al ver que la única forma de ocupar la silla de la presidencia municipal es mediante una designación directa del congreso y para un tiempo muy limitado. Sin embargo ya se sienten dueños del municipio, dueños de la nómina y dueños de los empleados, estos últimos los que han tenido que pagar los platos rotos debido a que los interinos se sintieron presidentes municipales y comenzaron a meter a “su gente”.
En el caso de Cuautepec, pretendieron hacer que los empleados firmaran renuncias “voluntarias”, y como en otros municipios comenzaron a despedir gente, lo que ya ha comenzado a llegar a los tribunales del trabajo en forma de demandas, y no será extraño que los interinos en lugar de entregar cuentas entreguen un municipio demandado, endeudado por esas demandas y encima con una duplicidad de nómina por qué mientras despidieron a unos para acomodar a “su gente”, en caso de reinstalación de trabajadores tendrán que pagar los sueldos caídos.
Pero la culpa no es del “monstruo” que pusieron en el concejo los flamantes diputados sino del congreso que no analizó bien los perfiles y repartió el estado de Hidalgo entre las distintas fuerzas políticas como soldados romanos las ropas del Cristo.
Es raro que en el artículo 126 de la constitución de Hidalgo señale que el “Concejo estará integrado por el número de miembros que determine la ley, quienes deberán cumplir los requisitos de elegibilidad establecidos para los regidores” y que en el artículo 128 entre los requisitos para ser miembro del ayuntamiento (por ejemplo regidor) se requiere de “no desempeñar cargo o comisión del Gobierno Federal, Estatal o Municipal, en la circunscripción del municipio, a menos que se separen de aquéllos cuando menos con sesenta días naturales de anticipación al día de la elección, a excepción de los docentes”.
Y que aún con esta advertencia veamos a ex directoras del sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) municipal, encabezando o formando parte de estos concejos, tal es el caso de Singuilucan, dónde Maricruz Aguilar Flores, esposa del presidente municipal saliente, figura dentro del organismo (su perfil está acusado por construcción irregular de edificios en distintas demarcaciones del municipio y de otros como Tulancingo), o en Tianguistengo dónde el Concejo quedó presidido por Alejandra Rodríguez Escudero, esposa del presidente saliente Febronio Rodríguez Villegas, y extitular del DIF, por lo que muchos aseguran que las esposas se encargarán de limpiar las cochinadas que hayan dejado los maridos en la administración pública municipal.
Pero por si esto fuera poco, esas declaraciones que hicieron los diputados de buscar perfiles ciudadanos y honorables en los municipios quedó en “diretes” nada más, porque resulta que en municipios como Tulancingo se eligió a un personaje que se hizo famoso por un video dónde se encuentra completamente alcoholizado, ¿En serio estos son los perfiles ciudadanos y honorables que merecieron los municipios? Y son solo algunos (seguiremos analizando los demás).
Sin duda también habrá concejos donde no se comprueben relaciones clientelares con la administración saliente, también habrá concejos que no sean utilizados para limpiar cochineros y sin duda que deberá haber al menos uno entre los 84 que entreguen cuentas claras a las nuevas administraciones, sin embargo hoy todo está en duda porque se ha visto que algunos de los concejos servirań como instrumentos para condenar a unos y limpiar el nombre de otros, en unos municipios con el cinismo político del cual la ciudadanía ya se cansó, y en otros asegurando que “son ciudadanos” y no instrumentos de la maquinaria política.
Ya veremos cómo entregan cuentas los que ahora se sienten dueños y dueñas de los municipios hidalguenses, y aunque son sólo tres meses, puesto que el 15 de diciembre los presidentes municipales deberán asumir el cargo, hay quienes aseguran que muchos de estos presidentes del concejo están maś preocupados por mandar hacer sus retratos para el muro de expresidentes que por atender las problemáticas que se tienen en los municipios.