Tulancingo.- A 11 días de que se realice la rifa del «avión presidencial», la población de Tulancingo ha respondido bien a la convocatoria del AMLO, para la adquisición de su “cachito”.

Así se comprobó tras un pequeño sondeo entre personas que suelen comprar billetes de la Lotería Nacional.

La rifa del avión será el 15 de septiembre y pretende entregar cien premios de 20 millones de pesos cada uno, entre un universo de seis millones de boletos disponibles.

Al corte del 25 de agosto el director general de la Lotería Nacional para la Asistencia Pública, Ernesto Prieto Ortega, reportaba una venta del 33 por ciento, es decir, dos millones 24 mil boletos, con un costo de 500 pesos cada uno.

Mónica León Ruiz, encargada del expendio 2304, del centro de Tulancingo, reconoció que al saber que sí se haría la rifa, pensó que no tendría buena respuesta; sin embargo, sus ventas han sido buenas, tanto que tuvo que pedir más boletos.

De ocho entrevistados, siete afirmaron que ya compraron su boleto para la rifa y lo hacen, sobre todo, en apoyo a AMLO, además de tener la ilusión de poder ganarse los 20 millones de pesos.

Juan Manuel Chávez reconoció que quiere apoyar la idea del presidente, porque es una manera de acabar con la corrupción. 

Lo mismo opinó Alfredo Cruz, pues aseguró que compró el boleto por cooperar con el movimiento de AMLO que está tratando de sacarnos adelante.

Graciela Martínez, por su parte, indicó que compró no sólo un boleto, sino tres y que lo hizo para apoyar al presidente de la República, porque considera que está haciendo justicia a la impunidad, robo y tanta maldad de los presidentes corruptos.

María de la Luz Santos, dijo que se le hacía demasiado caro y tenía otras prioridades en casa que debería suplir, principalmente por darle lo mejor a sus hijos.

Recientemente, el presidente López Obrador hizo un llamado a los ciudadanos a seguir apoyando la compra de boletos para la rifa, y reiteró que el dinero se utilizará para adquirir equipo médico.

La aeronave, que fue adquirida a finales de la administración federal de Felipe Calderón, fue objeto de críticas durante el sexenio pasado por el actual presidente, tanto que prometió que si llegaba a la Presidencia lo vendería.