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Hace cinco siglos… hace cinco años

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  • Complejo hidráulico cumplió 500 años de construcción y cinco de ser patrimonio de la humanidad
  • Recorre municipios del estado de México y de Hidalgo (Zempoala y Tepeapulco).

SEGUNDA PARTE.- A cinco siglos de haber sido construido el “Acueducto del Padre Tembleque”, y en el marco del quinto aniversario de haber sido inscrito como Patrimonio de la Humanidad, diversos historiadores efectuaron una serie de actividades por el acontecimiento.

Durante estos días historiadores, académicos, investigadores, presentaron narrativas y escritos en torno a una de las obras arquitectónicas lacustres más hermosas y famosas del mundo.

Los historiadores realizaron una reseña de esta declaratoria de inscripción, donde señalaron que “El Acueducto del Padre Tembleque” fue declarado por la Unesco, el 5 de julio de 2015, Patrimonio de la Humanidad. 

ACUEDUCTO TESTIGO DE CINCO SIGLOS DE HISTORIA 

Y ahí está… Ahí está la obra, que realizada en 1520, se convirtió en una de las mayores expresiones históricas de nuestro México Virreinal, que recorre municipios del estado de México y de Hidalgo (Zempoala y Tepeapulco). 

Su construcción inició en el Siglo XVI, bajo la batuta de Fray Francisco de Tembleque. A las faldas del cerro conocido como Tecajete, en Zempoala, existe un cuerpo inmenso de agua, razón por la que el fraile decidió iniciar su construcción en este lugar.

El resultado fue una magna obra de ingeniería hidráulica, consolidando la creatividad constructiva que unió la civilización europea con la mesoamericana

El complejo hidráulico está compuesto de una zona de captación de aguas y fuentes, una red de canales, un conjunto de depósitos y una serie de puentes-acueductos. Uno de estos puentes tiene la mayor arcada de un solo nivel construida en toda la historia en una obra de este tipo.

La obra tiene una longitud de 48 kilómetros, 38 de los cuales corren desde su origen en los manantiales de las faldas del volcán El Tecajete hasta Otumba, con una bifurcación de 10 kilómetros que surtía agua a las poblaciones de Zacuala y Zempoala.

Esta construcción tiene dos peculiaridades; la primera, es conocida por la arquería, sin embargo el 95 por ciento es subterráneo, con una profundidad que va desde unos cuantos centímetros hasta los dos metros.

La segunda, son los glifos de la arquería mayor con representaciones religiosas y militares de tipo prehispánico realizadas por los constructores.

ACCIDENTADO PERO MUY EFICIENTE RECORRIDO

En los trayectos en donde se tuvieron que librar barrancas se edificaron seis puentes sobre los cuales se colocaron los apantles, con el objetivo de conducir agua a los pueblos Otompan (hoy Otumba), a la Congregación de Todos los Santos (hoy Zempoala), así como a las comunidades ubicadas en su trayecto de la Arquería Monumental.