LA HISTORIA DE NORA

Se trata de una joven de nombre Nora Mérida Ramírez, se suponía que la habían secuestrado para robarle a su chavito de dos años de edad. El rapto fue en Tecámac en el Estado de México, ella fue encontrada más muerta que viva en la comunidad Dajiedhi, del Municipio de Actopan Hidalgo, tenía heridas de arma blanca en el cuello, abdomen y en los brazos, la llevaron al hospital y los médicos lucharon a calzón quitado con la calaca para que no se la llevara.

Después de dos días encontraron al niño sano y salvo en Zumpago Estado de México, trabajaron juntos los agentes de la Coordinación de Investigación (grupo) Pachuca y los ministeriales del Estado de México, pero estaban como cuando Colón descubrió América, no sabían dónde andaban, ni por dónde empezar, no dejaron de trabajar buscando pistas. Eso fue el pasado miércoles 30 de septiembre en la madrugada, el niño tiene dos años y se llama Axel Aarón Mérida Ramírez.

Los policías encontraron pistas de los agresores de Nora, quien se recupera de sus heridas graves, sigue diciendo que fue agredida a cuchilladas para quitarle al niño. El director de Averiguaciones Previas anunció que se tienen sólidas investigaciones para esclarecer la agresión de Nora, dijo que la mujer, a quien daban por muerta, estaba lista para declarar qué es lo que verdaderamente pasó y salió a la luz algo. El domingo a las 10 de la noche salió de Tecámac Estado de México, se los llevó un automóvil Volkswagen tipo Pointer color gris, a ella y a su hijo; como piloto viaja Adrián González y como copiloto otro tipo llamado Andrés. La golpearon y la dieron por muerta.

Identificados los agresores de Nora, la policía anda tras sus huesos, la joven mujer que en días pasados tenía una pata en la tumba, abrió la boca y declaró ante el Ministerio Público “Los que quisieron matarme se llaman Adrián González y Andrés Villegas, me abandonaron en un lugar, pensaron que estaba muerta”. La policía descarta que trataran de robarle a su hijo, su idea era dejarlo abandonado a su suerte, y lo dejaron en Zumpango Estado de México en una unidad habitacional.

Comentó un vecino que como a las 4 de la mañana, pasaba por el lugar entre la oscuridad, escuchó el llanto de un niño y dio aviso a la policía. Así fue como lograron rescatar a quien resultó ser Axel Aarón, a quien llevaron al DIF municipal y lo enviaron a un albergue provisional de Toluca, en donde haciendo investigaciones supieron quién era y lo entregaron a sus abuelos.

Cipriano Iván Mérida Salas y a su esposa María de Lourdes Ramírez Villafuerte, explicaron que trabaja como taxista en Tecámac, que como a las 2 de la mañana del pasado lunes recibieron una llamada telefónica donde le dijeron que a su hija Nora Itzel la habían encontrado en el municipio de Actopan, en Hidalgo, con lesiones muy graves. Apresurados se trasladaron al lugar donde les comunicaron que la mujer fue localizada por unos lugareños en un despoblado y que la estaban operando de emergencia, cuando salió el doctor le preguntaron muy angustiados sobre ella, el médico les dijo que estaba pelón para que se salvara porque la llevaron con heridas en el cuello, abdomen y en la tetilla izquierda, así como en ambas muñecas.

Sus padres declararon “mi hija cumplió 20 años el 11 de este mes, es madre soltera, trabaja como edecán en el Estado de México. Hace aproximadamente tres meses se fue a vivir sola en el fraccionamiento “Galaxias” en Tecámac, dijo que quería independizarse para salir adelante con su hijo. Sabíamos que compartiría un departamento con una amiga que se llama Abigaíl, quien ahora no recuerdo su apellido, pero había estado casada con Andrés Villegas, se separaron y tenía relaciones con Adrián González, ellos no se conocían pero luego lo hicieron e idearon un plan para matar a mi hija, porque estaba sonsacando a su amiga. Me imagino que lo hicieron por venganza porque ya formaban el triangulo de las trompudas. Culpando a Nora como sonsacadora”.

“Esto es lo único que sé y les puedo decir, pero de corazón no tengo palabras ni dinero para agradecerles a todos los que intervinieron en ayudar a mi hija y a mi nieto, a las autoridades de Hidalgo y el Estado de México sólo les pido que, como ya tienen identificados a los que trataron de matarla y dejar morir a mi nieto, los agarren lo más pronto posible”. Ya para terminar una historia y señalar el trabajo que realizaron las autoridades, sólo nos falta para cerrar el capitulo que los agarren.

SE SALIÓ POR UNA VENTANA DE SU CASA Y DIO EL RANAZO

Eleuterio Ventura del Carmen de 60 años de edad, estuvo tomando con unos amigos en su casa, después de que se despidieron él quería seguir la parranda, su vieja no lo dejó salir y cerró las puertas con llave por dentro, se quiso escapar por la ventana que da al patio, pero se le olvidó que estaba en el segundo piso, se cayó y murió.

Eleuterio hizo una fiesta en su casa e invitó a familiares y amigos, y alguno que otro vecino. Estuvo muy feliz empinando el codo, como comenzaron desde la hora de la comida, ya eran las 7 de la noche, se había acabado los pomos y se empezaron a despedir de él agradeciendo el grato momento que pasaron a toda madre. Eleuterio les dijo que no se fueran, que ahorita mandaba a su hijo por más para seguir tomando, pero uno de ellos le dijo en la oreja que ya su vieja estaba trompuda y mejor se iban a seguir la parranda a otro lado. Pero el señor, que lleva los pantalones en el hogar, era el primero que iba en la fila, pero discretamente fue sacado de las greñas, metiéndolo en un cuarto cerrando todo como la puerta negra, eso lo disgustó y buscó la forma de escapársele a su vieja. Con mucho cuidado abrió la ventana y saltó, de lo briago no se acordaba que estaba en el segundo piso.

Cuando escucharon el mulazo salieron a ver qué había pasado y encontraron el cuerpo sin vida de Eleuterio, que miraba al cielo con las manos en cruz, llamaron a la ambulancia para que fuera a la calle de Francisco I. Madero, número 41, en el barrio de Nacozari de Tizayuca Hidalgo, pero dijeron los socorristas que no se lo podían llevar porque ya se había ido al valle de las calacas.

Llegó un pelotón de gendarmes, quienes llamaron al Ministerio Público diciéndole que ahí estaba un muerto. Llegó el agente acompañado de toda su flota, los peritos de criminalística, los agentes de la Coordinación de Investigación, los uniformados, Protección Civil y los bomberos, que dieron el banderazo para levantar el cuerpo y mandarlo al SEMEFO y comenzaran las investigaciones.

Su hijo Jesús Ventura de 32 años de edad, declaró que se cayó de la ventana de su recámara, que sólo escucharon el golpe. La señora Carmen Cajal dijo que estaba muy tomado y lo subieron a dormir a su recámara, y él se quería ir con sus compañeros a seguir la fiesta, pero como ya estaba muy tomado no lo dejó, piensa que se quiso escapar por la ventana, pero no se acordó que estaba en el segundo piso y cayó de 6 metros.

UN BORRACHO LE AVENTABA DE BALAZOS A SU VIEJA

Una movilización de patrullas subió por la calle de Galeana, despertando a la gente, era medía noche. Les habían hablado al 066 para decirles que en el barrio del “Arbolito”, cerca de la escuela se escucharon balazos. Había mucho mirón por la ventana, otros precavidos se asomaban por la rendija de su puerta, no les fueran a dar un tiro a media madre.

Los policías agachados como jorobaditos unos tras otros, apuntando sin saber a dónde, moviendo la cabeza para todos lados. Sólo se escuchaba el ladrar de los perros. De momento se oyeron otros balazos, era por la calle del Porvenir, corriendo se subieron a sus patrullas haciendo mucho escándalo despertando al vecindario. Llegaron a una casa donde una pareja discutía acaloradamente mentándose la madre y diciendo unas groserías de arriero, los gritos se escuchaban hasta la calle.

Tocaron la puerta y les contestaron muy enojados “¿Qué quieren?”, uno de los policías la abrió de una patada, otro se metió pero salió hecho la madre, lo sacó un perro. Uno de los granaderos con el rifle le pegó al animal en la mera cholla, que estiró la pata, entraron y encontraron a un borracho con una pistola en la mano apuntándole a su vieja, les dijo “Si no se largan le vuelo la cabezota”, uno de los policías de un madrazo lo tiró y le echaron bolita para quitarle la pistola a madrazos se lo llevaron ante el Ministerio Público, donde dijo la señora que se llamaba Ángela García y su viejo Pascual Hernández, que llegó hasta las chanclas, para apantallarla echó balazos al aíre y luego la quería fusilar. Que no sabe de dónde sacó la pistola y qué bueno que llegaron a tiempo, que si no se la echa.

LA ATACÓ CON UN MACHETE

Ismael Márquez León llegó a su casa en la calle de Terroristas en la colonia La raza, echando madres buscando a su vieja, le faltaba la más mínima cosita para que explotara. Siempre se ha distinguido como su segundo apellido, un hombre de pocas pulgas y nervioso.

Vive con su vieja hasta la punta del cerro, su vieja ya conoce de qué pata cojea y sabe que es puro pájaro nalgón. Le gritó a su vieja mentándole la madre, la señora le contestó “A quién le cantas, güey” poniéndose en guardia, lo cruzó de un madrazo, le hizo una finta que le iba a dar un faul y el hombre con las dos manos se lo tapó, y ella le llegó con un gancho en la quijada, que lo hizo levantar la patas.

La señora estaba peleando limpio y como sabe que al caído no se le pega, dejó que se levantara y cambiaron madrazos, su mujer le iba ganando, en un descuido recibió otro golpe en la quijada, otro en el hocico que lo descontroló y cayó de cola en el suelo, haciéndose las nalgas cuadradas.

Sacando el honor de hombre, se levantó y le tiró madrazos a lo loco, la señora los cabeceaba, le dio un patín en los bajos que lo dejó quieto. Cuando se repuso subió a su cuarto y bajó con un machete y le dio a la señora que cayó en un charco de sangre, sin decir pio. Sus vecinos llamaron al 066, llegó la policía, le quitó el machete y se lo llevaron, le preguntaron el nombre de la señora, les dijo que no se la mencionaran. La señora no pudo declarar por lo grave que se encuentra. Ismael está en la cárcel, su barrio lo extraña.

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