El artista se dio a la tarea de enderezar a mano -con la ayuda de un equipo de trabajadores- cada una de las varillas provenientes de la destrucción para crear la instalación “Straight” (Derecho).
La prestigiada Real Academia de las Artes por primera vez dedica el patio central y 11 salas al artista y disidente chino, Ai Weiwei, a través de una retrospectiva de 1993 a la fecha.
Entre los trabajos, que abren al público a partir del próximo sábado, el artista presenta una instalación en memoria a las víctimas del devastador terremoto de Sichuan en 2008.
Ai transforma materiales para transmitir sus ideas, como las más de 90 toneladas de varilla torcida que compró de manera anónima en los vertederos de desperdicio tras el terremoto de Sichuan y transformó para rendir tributo a los estudiantes que perecieron debido a la mala calidad en la construcción de las escuelas.
Para demostrar el costo humano, dos enormes paredes blancas contienen los nombres impresos y fechas de nacimiento de cada uno de los menores que falleció en el terremoto.
