Actualmente, la producción diaria de petróleo suma un millón 700 mil barriles, 100 mil más con respecto a diciembre de 2018
En diciembre de 2012, cuando Enrique Peña Nieto asumió el poder, México extraía diariamente 2 millones 100 mil barriles de petróleo. A finales de 2018, al finalizar su sexenio, esta cifra bajó a un millón 600 mil.
“Con un esfuerzo descomunal, el gobierno de AMLO ha logrado sacar a Petróleos Mexicanos (Pemex) del hoyo en que se encontraba y estabilizar su producción. Ha sido una hazaña, sin duda.
Ahora bien, aunque este esfuerzo representa un parteaguas en la historia del país, la producción petrolera está a punto de alcanzar su tope”, dice Fabio Erazo Barbosa Cano, profesor de la Facultad de Ingeniería e investigador del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM.
De acuerdo con Barbosa Cano, en 2020 habrá un aumento leve, moderado, de la producción petrolera, como en 2019, y otro más en 2021, pero hasta ahí, porque la mayoría de los yacimientos del país está dando muestras de agotamiento.
Como resultado de los altos precios que alcanzó el petróleo en el arranque del siglo XXI, el gobierno de Vicente Fox obtuvo cuantiosos ingresos económicos que le permitieron impulsar la exploración y extracción petrolera. Esto hizo que la producción de Pemex alcanzara su pico: 3 millones 400 mil barriles diarios, de los cuales un millón 800 mil se exportaban.
“Sin embargo, en agosto de 2003, este nivel de producción comenzaron a caer, consecuencia de diversos factores. El más significativo fue la sobreexplotación depredadora, al inyectársele nitrógeno. Uno de los yacimientos petroleros más grandes del planeta, Cantarell colapsó. Hoy en día está convertido en ruinas”.