RETRATOS HABLADOS
Cualquier misión espacial que se precie de respeto, está obligada a realizar el último conteo previo a la ignición de los motores, desde el 10 hacia atrás, y justo cuando se llega al 1, ya no hay marcha atrás y, pase lo que pase, debe darse paso al encendido del combustible (hasta los tiempos del Apolo conformado por hidrógeno y oxígeno líquido), y una gigantesca llamarada avisará a los asistentes al evento, que la misión ha empezado.
Hoy, casualmente, la cuenta regresiva para la conclusión de las campañas políticas de quienes aspiran a la primera magistratura de Hidalgo, empieza. Solo quedan 10 días que para muchos resultan insuficientes, para cambiar dramáticamente el desenlace de uno de los capítulos más tensos en la renovación del Poder Ejecutivo.
Nunca, en más de 87 años que el tricolor ha mantenido en su poder la gubernatura, se había generado un escenario tan complicado y plagado de intervenciones de tipo federal, en el que incluso ha tenido una participación protagónica el presidente de la República desde La Mañanera, a través de sus ya conocidos comentarios, risas y otros elementos histriónicos.
Nunca una alianza conformada por PRI, PAN y PRD, se habían jugado tanto en un proceso electoral, porque incluso su permanencia como opción para el electorado corre un riesgo grave, aún más que cuando perdieron la Presidencia de la República.
Nunca, también, en su aún corta historia como partido oficial en el país, Morena había desplegado absolutamente todo a fin de que su candidato, Julio Menchaca Salazar, imponga una modalidad de victoria que busca evocar los tiempos más intensos del tricolor, en que no solo ganaba sino aplastaba a sus oponentes.
Nunca Morena se había jugado tanto, porque Hidalgo es un símbolo del poder del Revolucionario Institucional y sin duda el signo claro de su eventual regreso a la competencia política, porque de ganar el 5 de junio empezaría a perfilarse con fuerza real, para recuperar la Presidencia de la República, bien se a través directamente del PRI o de uno de los dos partidos con los que decidió hacer alianza.
Estamos pues ante el conteo final de una nueva era presidencial, si se da la victoria morenista que podría anticipar continúe en poder presidencial por quién sabe cuánto tiempo más, o, todo lo contrario: el final repentino de su proyecto elaborado a por lo menos 30 años.
Mucho se juega el próximo 5 de junio en territorio hidalguense, porque no solo es el futuro de sus habitantes, sino de toda la población del país.
La cuenta regresiva empieza.
Mil gracias ,hasta mañana.
jeperalta@plazajuarez.mx/historico/historico
@JavierEPeralta
