La líder moral y fundadora del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Hidalgo, Teresa Samperio León, cuestionó el trabajo que han dejado de realizar los diputados locales, ya que aseguró que si estos hicieran bien su trabajo no habría necesidad de que los dirigentes de los partidos políticos se reúnan con el poder ejecutivo para tratar dichos temas, o bien la mesa política será una mesa de negociación “en lo oscurito”, donde los dirigentes buscarán sacar la mejor tajada para satisfacer intereses personales.

“No me extraña que se de este tipo de mesas políticas, siempre ha habido una relación en lo oscuro entre los dirigentes de los partidos políticos con el gobierno estatal, y aunque no se sepan las intenciones, los procedimientos ya dejan mucho que especular, porque toda reforma a la ley debe emanar del congreso, por eso se destina tanto dinero del erario público, y no de una mesa política en la que no hay presencia de legisladores y que coordina el gobierno estatal”, dijo.

De igual forma puntualizó que la intervención de los dirigentes de los partidos políticos, se tendría que hacer de manera interna a fin de que sean los diputados que tienen en el congreso los que suban al pleno las iniciativas y cumplan con su trabajo tanto de legislar como de defender las propuestas que están encaminadas a tener mejoras, en este caso al Código Electoral del Estado de Hidalgo.

“No debemos hacer un lado la responsabilidad que tienen los diputados, porqué permiten que los líderes se sienten con el gobierno estatal, para que les hagan su trabajo, es demasiado lo que se gasta para mantener cada curul en el congreso del estado además de lo que se eroga para gastos de asesores, para que al final de cuentas los diputados lleguen y solo levanten la mano para votar a favor un proyecto hecho en una mesa política, por los dirigentes de los partidos y el ejecutivo estatal”, aseveró Samperio León.

Finalmente, respecto al tiempo que resta para poder reformar la ley, Samperio León cuestionó a los partidos políticos que esperaron a que el gobierno estatal convocara a una mesa política en lugar de hacer los propio dentro de cada instituto político a fin de llevar las propuestas directamente al congreso.